Senderismo en Gredos

En este viaje ascenderemos a pie a más de 2.000 metros de altitud, subiendo por la Sierra de Gredos hasta divisar el Pico Almanzor, el circo de Gredos y la Laguna Grande. Partimos de la Plataforma de Gredos, en el municipio de Navacepeda de Tormes, en Ávila, a donde os recomendamos llegar antes de las 9 de la mañana para evitar el pago del acceso al aparcamiento y también para sufrir menos el calor en los meses de verano. El camino arranca con una pronunciada subida en una senda enormemente pedregosa, que será la tónica general en este recorrido de unas 5 horas de duración y de casi 13 kilómetros ida y vuelta.

Es de dificultad media-alta, dependiendo de la estación del año, pero en todo caso, para quienes no estén muy acostumbrados a este tipo de actividades, puede hacerse un poco duro, especialmente por la incomodidad que supone para caminar este tipo de terreno, por lo que no es muy aconsejable para niños pequeños. Es importante llevar un calzado cómodo, mejor botas de montaña que zapatillas de deporte, y no olvidar una botella de agua, aunque en la ascensión nos encontraremos un par de fuentes.

En el prado Pozas nuestra vista tiende a hacer un barrido del majestuoso paisaje de piornales y praderas y de los roquedos, frecuentados por aves como buitres, milanos y águilas, además de pasar a escasos metros del ganado vacuno que mira con curiosidad a los caminantes. Tras pasar por el arroyo Pozas se llega a la fuente de los Cavadores, para realizar un primer descanso.

Poco a poco nos iremos acercando a un paisaje glaciar que nos vincula con la alta montaña. El techo de nuestra excursión se encuentra en Los Barrerones a 2.170 metros, desde donde se tiene una magnífica vista que ya de por sí justifica toda las ascensión. Allí es habitual encontrar las conocidas cabras montés de Gredos, ya acostumbradas al ir y venir de humanos.

Frente a nosotros el circo de Gredos, el mayor del sistema Central, y, entre otros picos, el Morezón, Las Hoyelas, los Tres Hermanitos, el Cuchillar de las Navajas, el Almanzor, La Galana y la Portilla del Rey. Destacando sobre todos ellos, el Almanzor, el techo de Castilla con sus 2.592 metros de altitud. Este mirador es lo mejor de la senda y requiere una buena pausa para retener todo lo que ofrece al caminante.

Desde aquí se desciende hacia la Laguna Grande, muy visitada a pesar de no ser realmente el fondo de la cuenca. Tendremos una nueva oportunidad para refrescarnos en otra fuente antes de continuar zigzagueando hasta la laguna, que desagua en la garganta de Gredos y que a su vez sirve al río Tormes.

Una vez completada la caminata es la hora de pensar en dónde comer. Nuestra sugerencia es desplazarse hasta la localidad de Barajas, muy próxima y situada antes de llegar al Parador Nacional de Turismo, y visitar el restaurante La Dehesilla. Sorprende encontrar una carta tan sugerente y unos platos tan bien elaborados. Además, el personal es sumamente agradable.